martes, 23 de marzo de 2010

Singetram Agrede a MMC

SINGETRAM Agrede al Ministerio

CON EL PARO DE MMC AUTOMOTRIZ TODOS PIERDEN, NADIE GANA...

La ensambladora MMC Automotriz, que hace ya varios años fue establecida como objetivo político por un grupo sindical radical afecto al gobierno, denunció ayer a través de unos remitidos que "continúa la violencia en nuestra planta". Tras una reseña síntesis de lo que ha sucedido concluye que desde el jueves 11 de febrero al viernes 19 de marzo la planta dejó de producir 1.475 vehículos, con unas pérdidas de 62.400.000 bolívares fuertes. Por otra parte, debido al paro ilegal provocado por el grupo sindical radical minoritario no se han generado impuestos (municipales, estadales y nacionales) por un monto aproximado de 59.500.000 bolívares fuertes. En su comunicado, MMC Automotriz insiste en solicitar el apoyo de las autoridades, regionales y nacionales, en la búsqueda de alcanzar una inmediata finalización del conflicto. Plantea que a pesar del esfuerzo hecho por las autoridades del Ministerio del Trabajo, "la violación de las leyes y las constantes acciones de violencia e intimidación han continuado generando y aumentando las pérdidas económicas, lo que continúa aproximando a esta empresa a un estado de total inviabilidad". MMC Automotriz reitera que "no está en sus planes abandonar el país", "que está segura que con la participación de todos los trabajadores que desean construir un futuro mejor para ellos y sus familias, nuestra planta volverá a iniciar sus actividades próximamente y derrotará las acciones violentas, terroristas y anárquicas del grupo de trabajadores, y ex trabajadores, que, por razones desconocidas, pretenden llevar a nuestra organización a la quiebra".

Comunicado 21 y 22 de Marzo 2010.

Inspectoría aprobó despido de 10 trabajadores de MMC

La medida generó el desalojo de la planta en Anzoátegui
Puerto La Cruz.- Este viernes, la planta de la Mitsubishi en Barcelona quedó totalmente sola, pues los trabajadores desalojaron las instalaciones en horas de la mañana y tanto obreros como empleados administrativos salieron de la empresa, que quedó bajo la custodia del personal de vigilancia.

La Inspectoría del Trabajo de Anzoátegui dictó 10 nuevas medidas cautelares contra trabajadores de la ensambladora MMC Automotriz. Con esta decisión el número de obreros despedidos que ha autorizado el organismo asciende a 15, desde que el sindicato Singetram inició una huelga el pasado 11 de febrero.

Al mediodía el personal obrero estaba concentrado en la sede de la Inspectoría del Trabajo. Durante el conflicto, la empresa ha dejado de ensamblar unas 1.000 unidades.

Serios Indicios de Cierre de Mitsubishi.

Dadas las graves circunstancias en la que un pequeño grupo de desadaptados manipuladores, ajenos a los intereses y necesidades de la mayoría de los trabajadores de la ensambladora de Anzoátegui, han colocado a la empresa, existen serios indicios del cierre definitivo de esta empresa en el país.

Ejecutivos de SOJITZ planean una visita al país para evaluar la posibilidad del cierre definitivo ante el hecho de que la inversión y los proyectos de desarrollo en el país no solamente lejos de ser valorados más bien están siendo violentados por estos falsos sindicalistas, y descuidados por los entes del gobierno que no se han manifestado con la contundencia necesaria.

Voceros de la delegación japonesa han manifestado su estupor ante el hecho de que una minoría violenta haya sometido la voluntad de más de mil trabajadores, puesto contra las cuerdas a la directiva de la empresa y sometido a humillaciones a representantes del gobierno, quienes por temor o complicidad solamente han puesto una toallita húmeda con la aprobación de 15 despidos. Es bien sabido por todos que la solución a esta situación que pone en serio, muy serio peligro a más de 15 mil familias en todo el país, es el despido de la totalidad de elementos solicitados por la empresa. Esta será la válvula que permitirá el regreso de los demás empleados y trabajadores a las labores que garanticen su estabilidad y desarrollo personal y profesional.

Está claro para todos los sectores que el objetivo de estos desadaptados, que dicen defender a los trabajadores cuando los hechos demuestran a gritos todo lo contrario, es destruir la empresa, pedir la expropiación de la misma, con la ilusión de que ganarán puntos políticos al ganarla y ofrecerla como instalación para otra empresa. Pero se equivocan. No solamente dejarán sin trabajo ni ingresos a miles de familias, sino que se expondrán a las represalias que puedan tomar contra ellos cuando caiga por su porpio peso que se quedarán en la calle sin quien vuelva a contratarlos en la misma área y ni pensar en los mismos beneficios.

Los desadaptados de SINGETRAM creen estar consiguiendo su objetivo, pero si lo logran, muy probablemente consigan mucho más que eso, pero no para bien.